Los vehículos de movilidad personal (VMP) son vehículos de pequeño tamaño y de bajo impacto ambiental que se utilizan para desplazarse en zonas urbanas o suburbanas. Estos vehículos suelen tener un motor eléctrico, son compactos y ligeros, y se pueden usar para viajes cortos y para complementar el transporte público.
Entre los VMP más comunes se encuentran los patinetes eléctricos, las bicicletas eléctricas, los monociclos eléctricos, los segways y los hoverboards. Estos vehículos son fáciles de usar, económicos y amigables con el medio ambiente, ya que emiten menos emisiones de gases de efecto invernadero que los vehículos motorizados convencionales.
Sin embargo, es importante destacar que el uso de VMP puede tener riesgos para la seguridad del usuario, especialmente si se utilizan en carreteras o calles con tráfico vehicular intenso. Por lo tanto, muchos países y ciudades han establecido regulaciones para el uso de VMP, como límites de velocidad y restricciones sobre dónde se pueden utilizar estos vehículos.
En conclusión, los VMP son una alternativa cada vez más popular para la movilidad urbana, pero es importante que los usuarios los utilicen de manera responsable y respeten las regulaciones establecidas para su uso seguro y eficiente.